Constituye uno de los elementos centrales del Sistema de Aseguramiento de la Calidad. Tiene por objetivo orientar y responsabilizar a los establecimientos de la calidad de la educación impartida a sus estudiantes. A partir de los resultados asociados a la ubicación de los alumnos respecto de los Estándares de Aprendizaje y a los Otros Indicadores de Calidad Educativa, corrigiendo por nivel socioeconómico, y, cuando proceda, a los indicadores de progreso o valor agregado, se ordenan las escuelas en cuatro categorías de desempeño (Alto, Medio, Medio-bajo e Insuficiente).
La categoría de desempeño de cada establecimiento es informada a la comunidad y a partir de dicha ordenación, se identifican las necesidades de mejoramiento para los establecimientos, se definen modalidades de apoyo y la frecuencia de las visitas de evaluación y orientación que realiza la Agencia de Calidad de la Educación. En 2015 comenzó la marcha blanca de este proceso.
El Consejo Nacional de Educación ha establecido criterios de evaluación conforme los cuales informa la propuesta de Metodología de Ordenación de Establecimientos que formule la Agencia de Calidad de la Educación, así como sus futuros ajustes y modificaciones.